El referente de Proyecto Sur afirmó que el oficialismo de la provincia defiende a los grandes grupos empresarios.
Acevedo se opone a la Ley de Hidrocarburos de Buzzi.
"El satélite perdido aterrizó en Fontana 50”, dijo Acevedo. Ante la insistencia del gobernador electo Martín Buzzi acerca de la elaboración de una Ley de Hidrocarburos para la provincia, el referente del Frente Unidad Sur Andrés Acevedo dijo irónicamente que “el satélite perdido aterrizó en Fontana 50, en la sede del gobierno provincial. Hay que avisarle a la NASA para que deje de buscarlo. Cuando uno escucha las declaraciones de Buzzi sobre temas como petróleo y minería, no caben dudas de que es un satélite que ha perdido el rumbo y cayó en Rawson”.
En esta línea, recordó que “en primer lugar, Buzzi fue el Ministro de Producción de Das Neves, en el 2007, cuando se aprobaron los contratos petroleros que ahora lo horrorizan y que quisiera no repetir. Luego de esta aprobación, se llamó a silencio sobre el tema, porque su carrera política giraba en torno de Das Neves y él se comportaba como un satélite, girando alrededor del gran Mario. Así fue que recibió como premio la intendencia de Comodoro Rivadavia y la candidatura a la gobernación. El resto ya es conocido: apenas ganó, cambió de órbita y comenzó a girar en torno de los jefes kirchneristas”.
El candidato a Diputado Nacional, afirmó también que “es necesario reconocer, sin embargo, que hay algo en lo que Buzzi se mantiene firme: en la defensa de los grandes grupos empresarios que se quedan con nuestro petróleo y que quieren quedarse con nuestros metales”.
Contra la propuesta oficial de Ley de Hidrocarburos Refiriéndose concrétamente sobre la propuesta de la Ley de Hidrocarburos, Acevedo declaró estar en contra. “En primer lugar, desde el Frente Undidad Sur, nosotros creemos que lo primero es revisar los contratos del 2007 y anular los que sean abusivos. No podemos permitir que nos sigan robando algo tan valioso como el petróleo. Ahora puede parecer que todo está bien, porque hay un boom de consumo. Pero, a mediano y largo plazo, las consecuencias serán nefastas. El petróleo es un recurso cada vez más escaso y lo terminaremos pagando carísimo”.
Como segundo argumento para oponerse a la propuesta, señaló que “si cada provincia aprueba una ley de hidrocarburos propia, será imposible
desarrollar una política energética nacional. Habrá artilugios y especificades propias de cada territorio provincial, diferentes plazos y mecanismos de control fiscal. Con esta fragmentación, se debilita en esta área el concepto de un Estado nacional fuerte y soberano. Y ya sabemos lo que pasa cuando se impone la ley 'Divide y reinarás”. El pueblo siempre pierde”.
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