La provincia más rica del país no cuenta con un plan de contingencia adecuado y serio, para actuar de manera menos improvisada y más planificada.
La tormenta que se desató el miércoles pasado evidencian la realidad de la provincia de Buenos Aires, la provincia más rica del país no cuenta con un plan de contingencia adecuado y serio, para actuar de manera menos improvisada y mas planificada.
A casi una semana del temporal, todavía hay miles de ciudadanos bonaerenses que la están pasando muy mal, al día de la fecha nose tiene conocimiento de la cantidad de viviendas que han sido destruidas en las zonas más carenciadas de la provincia de buenos aires, no existe una cifra exacta de muertos ni heridos, ni tampoco se anuncio programas o planes de reconstrucción.
Ninguna familia de las barriadas del gran Buenos Aires, puede acceder a un crédito del Banco Provincia, los más necesitados siguen esperando respuestas concretas a sus problemas de vivienda, luz,agua y seguridad.
Al respecto, cabe señalar el grave síntoma de crisis económica que atraviesan los municipios del conurbano bonaerense, respecto a que no pueden afrontar con recursos propios situaciones tan complejas como las actuales, debido a que no cuentan con los recursos necesarios para dar respuestas, mostrando importantes limitaciones a su accionar y dependiendo exclusivamente de los aportes de Nación y Provincia.
En estos momentos de emergencia es cuando más se hace evidente el fracaso de la política privatizadora y concesiones que sólo buscan la rentabilidad de sus negocios sin tener en cuenta el bien social que estos servicios suponen.
Ya debería haberse declarado la EMERGENCIA SANITARIA en las zonas afectadas, es urgente que se deriven los fondos, los materiales y la ayuda correspondientes y se le de el caracter de gravedad que reviste la situación.
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