Julio Raffo explica la situación legal de su película de manera transparente y aclaratoria.
"Caseros, en la carcel", película de Julio Raffo.
El lunes 31 de enero el diario “Clarín” publicó una importante nota, firmada por el periodista Omar Lavieri, sobre irregularidades imputadas a Jorge Coscia respecto de la producción de películas con modalidad denominada “3ro J”, sistema mediante la cual el INCAA coproduce películas asociado con entidades públicas o privadas.
En la nota se afirma que “no había un sistema transparente de rendición de gastos”, se menciona que hubo “189 expedientes: en 79 expedientes hubo rendición de cuentas y en 110 no se justificó ni un peso de los gastos…”. Respecto de las películas se afirma que “…algunas tuvieron repercusión, otras pasaron inadvertidas, tan inadvertidas que la Justicia no sabe si se terminaron, apenas en 68 de los 189 hay constancias de que las películas fueron terminadas… Unas 15 carpetas fueron analizadas por los peritos… Bonadío ordenó un nuevo peritaje sobre otras ocho películas. Una de ellas fue producida por Julio Raffo, legislador porteño del espacio de Pino Solanas…”.
Bien puede ser cierto todo lo que he citado de esa nota y es cierto que Caseros fue una de esas 189 películas y que fue incluída en la pericia ordenada recientemente, pero en ella no se presenta ninguna de las patologías que Lavieri señala. Mi película “Caseros, en la Cárcel”, fue coproducida por el Centro de Estudios y Producción Audiovisual (CEPA), el INCAA y la UNLZ” y, si bien no se imputa a su realización ninguna irregularidad, al ser la única película mencionada inmediatamente después de aquella enumeración, el lector desprevenido es inducido a pensar que en la producción de Caseros podrían haber habido algunas de esas irregularidades.
Por ello, y respecto de “Caseros, en la cárcel” me siento obligado a informar lo siguiente:
1.- Fue terminada en fílmico, procesada en Cinecolor, sonido Dolby, con locuciòn de Eduardo Aliverti y se estrenó comercialmente el 4 de mayo de 2006 en los cines Arteplex Belgrano, Hoyts Abasto y Gaumont;
2.- En ella se registran los testimonios del Padre Puijané, Carlos Kunkel, Marcelo Vencentini, Hugo Soriani, Alberto Piccinini, Hernán Invernizzi, el “Canca” Gullo; el “Barba” Gutierrez y Ernesto Villanueva, entre otros.
3.- Fue objeto de críticas positivas en Clarín (Diego Lerer), La Nación (A. Martínez); Página 12 (Luciano Monteagudo), Ambito Financiero (H. Zapata) y La Prensa (JCF) entre otras, y con numerosas notas especiales, entre las cuales destaco las de Eva Giverti, Oscar Ranzani, Ernesto Villanueva y Luís Brustein entre otros.
4.- Se exhibió en el Bafici (2005) mereciendo un importante comentario de Mariano Blejman en Página 12;
5.- Participó en la competencia oficial del festival de Valladolid (Seminci) y fue exhibida en las secciones especiales de los Festivales de La Habana y Lleida de 2005.
6.- Fue editada en DVD por la empresa AVH, puesta a disposición del público en numerosos videoclubs, entre ellos Blockbuster, con comentario en la revista “Viva”;
7.- El buscador del Google acusa varios miles de referencias sobre esta película;
8.- La producción de la película presentó oportunamente sus cuentas y documentación al INCAA por lo cual tuvo su costo definitivo reconocido el 18/5/07 por Res. N° 802/07 de la Sra. María Lenz, Vicepresidenta en ese momento a cargo.
9.- El 29/07/09 se presentó al INCAA el informe de su comercialización y la liquidación la cual nunca fue objetada.
10.- Como a mediados del 2007 circularon versiones respecto de irregularidades en el proceder del INCAA en ese tipo de proyectos, con fecha 28/8/07, y en resguardo de la transparencia que debe tener siempre la aplicación de recursos públicos, presenté una nota en la cual autoricé a que “…toda persona pueda acceder a las constancias de este expediente, obtener fotocopias y hacer presentaciones…” y solicité la inclusión de “Caseros” en “…las auditorias que realiza la Administración del INCAA…” renunciando al derecho de que esa auditoria se realice “por sorteo”. (fs.170, Exp 528/05).
11.- Cuando tuve conocimiento de la inclusión de “Caseros” en los peritajes judiciales -en noviembre de 2010- me presenté al juzgado renunciando a los fueros que me pudieren corresponder por ser legislador.
En síntesis, la película existió, tuvo repercusión nacional e internacional, rindió y presentó sus cuentas al INCAA y fueron aprobadas, abrí el expediente a todos y solicité la auditoria de mis propias cuentas y renuncié a los fueros.
Lamento mucho que el periodista Lavieri no me haya preguntado nada sobre esto antes de incluir mi nombre –en negrita- en su importante nota. Espero con serenidad que los peritajes se hagan de acuerdo a las normas técnicas del Colegio de Profesionales de Ciencias Económicas, que el Juzgado no sea parcial y haga público el criterio por el cual se seleccionaron las películas incluidas en la investigación y se haga justicia para que “…cada uno reciba lo que le corresponda”.
Nota: En mi oficina de la Legislatura (N°106) cualquier persona puede examinar las constancias documentales que respaldan mis afirmaciones y requerir fotocopias de ellas.
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